"A Franco lo mató la policía ¡Ni un pibe menos!"
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- Categoría: DDHH
- Publicado: Martes 04 de Noviembre de 2014
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Nota relacionada: Apareció el cuerpo de Franco Casco
Este jueves apareció el cuerpo sin vida de Franco Casco, joven de Varela desaparecido en Rosario hace tres semanas. Apareció flotando en el río, a
la altura del centro de la ciudad, en el preciso momento en que se realizaba la primera marcha hacia la comisaría exigiendo su aparición.Todo
indica que se trata de un caso de crimen policial, seguido de un mensaje mafioso. Hasta el momento, las autoridades municipales y provinciales se mantienen en un significativo silencio.
Franco Casco
proveniente de Florencia Varela a viajó a Rosario para visitar a sus
parientes. El lunes 6 de octubre se propuso volver a Bsas en tren pero
lo perdió. Avisó a Elsa, su mamá, que recién tomaría lo tomaría el
martes 7 de octubre por la noche, y le pidió que fuera a buscarlo a
Retiro muy temprano en la mañana del 8.
El martes 7 sacó el boleto a
las 10 de la mañana y como tenía tiempo hasta las 12 de la noche, le avisó a su prima que salía a dar una vuelta. Desde ahí nunca más se lo vio.
Como Elsa no lo encontró en Retiro, tal como habían acordado,
avisó a sus parientes rosarinos y ese mismo día el padre de Franco viajó
a Rosario. Los parientes radicaron la denuncia en una comisaría la 20
que es la que corresponde a su barrio. Supuestamente esa comisaría debía
dar alerta a todas las restantes pero nunca lo hizo.
Cuando llegó el
padre desde Varela fue a la comisaría 20 pero no había noticias. Fue a la terminal de micros, de trenes, caminó por las cercanías de esos lugares y nada. Antes de volver al barrio, se metió en la comisaría 7a, muy cercana a la terminal de micros, y ahí le dijeron para su sorpresa que ellos habían detenido a un pibe llamado Franco pero cuyo apellido era Godoy. Es que Franco había dado el apellido de Elsa. Le dijeron que lo habían detenido a las 13.30 del martes 7 y lo habían liberado a las 22.30. Según el comisario, él y su gente salieron a buscarlo después de un supuesto llamado hecho por un vecino al celular del propio comisario para avisarle que había visto a un pibe sospechoso merodeando muy dado vuelta.
Cuando lo encontraron -siempre desde la versión del
comisario- Franco se habría resistido tirándoles piedrazos y rompiéndole
la camisa a un suboficial al momento de su detención. Después dieron
parte a un fiscal y este simplemente pidió que averiguaran si tenía
antecedentes. Nunca se acercó a la comisaría. Como no tenía
antecedentes, supuestamente lo liberaron a las 22.30. Hacia el final de
la detención un médico le sacó varias fotografías que el nuevo fiscal de
la causa le mostró a Elsa. Allí se lo ve muy golpeado y no simplemente
con el labio roto, tal como había dicho el comisario.
A partir de acá empiezan todo tipo de dudas y confusiones. En principio, la comisaría se negó a mostrar a los familiares el acta de ingreso de Franco. Después de mucha insistencia y de reunirse el comisario y sus subordinados durante media hora, salieron y le leyeron a la madre (quien
había viajado desde Varela) una crónica en la que insistían en que Franco estaba muy drogado y que había agredido al personal. Como ella pidió leerlo, el comisario le mostró la firma de Franco pero Elsa insiste con que no es la letra de su hijo. En el habeas corpus se pidió un perito calígrafo.
Los fiscales no hicieron nada durante los
primeros 10 días y poco hicieron hasta el momento. No actuaron según el
protocolo. Es decir, no dieron rápidamente parte a la Secretaría de DDHH
provincial, tampoco al Gabriel Ganón y los defensores provinciales, no
hubo una búsqueda en los hospitales y morgues. Recién con la presión de
los movimientos sociales y la familia se empezaron a mover un poco y
chequearon en hospitales y la morgue.
Elsa llega al Bodegón de Pocho porque justo está parando en Ludueña y le recomendaron que fueran a verlos. En el medio se acercó el PTS y otros oportunistas. Nada nuevo.
Por
lo pronto, cuando la fiscalía y la secretaría de DDHH. se enteró que
Franco no había dado el apellido Casco sino Godoy, dijeron que tenían
que volver a revisar todos los hospitales y la morgue y no volvieron a
comunicarse. La madre fue a los principales pero no le dieron pelota.
Respecto
al supuesto llamado de un vecino al propia celular del comisario. En principio el vecino se llamaba Daniel pero como lo negó dieron otro nombre. En el haber corpus pedimos que lo llamen a declarar a él, al primer fiscal que intervino (cuando la carátula era resistencia a la autoridad), entre otra larga lista de personas y funcionarios, incluidos
todos los integrantes de la comisaría 7a.
La madre pegó fotos de su
hijo por toda la zona de la comisaría 7a y desaparecieron al poco
tiempo. Un suboficial s extrañamente se acercó al bar en donde trabaja
una familiar de Elsa con la foto de Franco diciendo que lo estaban
buscando. Muy raro.
Hubo una "requisa" en la comisaría hecha por parte del equipo de Ganón pero no había nada y nadie vio nada. Los internos dijeron que lo escucharon pero que Franco no entró a sus celdas
porque solamente estuvo demorado.
El gobierno provincial nada. No llamó a los familiares ni intervino en la causa.
este
jueves apareció el cuerpo sin vida de Franco Casco, joven de Varela desaparecido en Rosario hace tres semanas. Apareció flotando en el río, a
la altura del centro de la ciudad, en el preciso momento en que se realizaba la primera marcha hacia la comisaría exigiendo su aparición.
Todo
indica que se trata de un caso de crimen policial, seguido de un
mensaje mafioso. Hasta el momento, las autoridades municipales y
provinciales se mantienen en un significativo silencio.