Dias de Diario
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- Categoría: Comunicación
- Publicado: Miércoles 08 de Octubre de 2008
(Celeste Neyra- Red Eco) Ciudad de Buenos Aires- Como desde hace meses, hoy los periodistas del diario El Cronista y las revistas IT y Apertura se reunieron en asamblea para definir los pasos a seguir en el marco del reclamo de reestructuración salarial. Con una masiva participación y frente al desgastante silencio por parte de la empresa, la votación fue contundente: se ratificó la medida de no firmar notas para el diario de mañana, jueves.
Lo mismo sucedió con la edición de hoy. Cuando los habituales lectores del matutino fueron a buscar las notas especializadas sobre economía y finanzas, recibieron información sin saber quién la había escrito. Dura incertidumbre en estas épocas.
La Asamblea de Trabajadores también definió que el jueves se realizarán dos horas de reflexión salarial, con paro de actividades y se hará una volanteada en la puerta del diario con el apoyo de la UTPBA (Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires).
En este contexto, la empresa, propiedad de Francisco De Narváez, responde con silencio o evasivas. Por ejemplo, desconoce una deuda generada por el incumplimiento de lo acordado durante paritarias, en marzo de este año.
En este momento, los trabajadores reclaman directamente que se abra el diálogo para la recomposición de los salarios. Pero… la empresa les exige que firmen la homologación del convenio de marzo en el ministerio de Trabajo para luego discutir una “gratificación por única vez a fin de año sujeta a los resultados de la compañía”. De esta forma, se retrotraería el debate a la inflación de ese momento, se dejan afuera a los trabajadores que no entraron en ese acuerdo y no se incluyen las mejoras conseguidas posteriormente.
Como si fuera poco, el grupo editorial depositan con retrasos los aportes previsionales y, frente al reclamo de los periodistas dijeron: “la AFIP permite que nos atrasemos y nos permite acogernos a una moratoria, vayan a quejarse a la AFIP”.
Tal como afirman en un comunicado de prensa, los trabajadores también preguntaron por qué “luego de casi 20 años de cobrar en la misma fecha, atrasaron sin previo aviso el pago de los sueldos y la respuesta fue porque es legal hacerlo”.
Pero, esto no se termina aquí… Ayer, llevaron a la redacción a un escribano para presionar a editores y jefes a que firmen un acta donde dejen constancia sobre quiénes participaban del paro. A lo mejor esta fue una medida que el colega político de De Narváez, el jefe de gobierno porteño Mauricio Macri, le recomendó luego de haber hecho lo mismo con los docentes.
Frente a estas respuestas, la Asambleas de Trabajadores del Cronista dice “para nosotros es sorprendente esta actitud, teniendo en cuenta que, en los últimos dos años (…) sólo hemos recibido elogios por nuestro trabajo. Elogios desde los más altos niveles de la dirección y el management del diario y las revistas, elogios de nuestros colegas, y de los lectores que han llevado a que El Cronista haya aumentado en más del 40% sus ventas e ingresos por publicidad, según datos de la propia empresa”.
Y, esto no se termina así tampoco para los trabajadores, que con una gran participación exigen la recomposición de sus salarios, más allá de las amenazas sembradas por el terrorismo de la crisis del capitalismo.