El  plan de obras lanzado esta semana por el gobierno argentino contempla en su mayoría proyectos que han sido anunciados desde el año 2003, pero que nunca se ejecutaron.
Dentro de los anuncios presidenciales para mantener activa la economía argentina, se lanzó un plan de obras públicas por el cual el Estado va a invertir 111.000 millones de pesos.
Está previsto que durante 2009 se inviertan 57 mil millones y el resto hasta el 2011. Los fondos saldrán de la ANSeS y de préstamos a gestionar en bancos multilaterales de crédito, incrementándose la nuevamente abultada deuda externa.
Luego del impacto mediático logrado – elemento del quehacer político al que recurren con regularidad los Kirchner- se reconoció desde las propias esferas del gobierno que gran parte de los proyectos ya habían sido lanzados durante la presidencia de Néstor Kirchner, aunque no se ejecutaron.
El propio Jefe de Gabinete Sergio Massa manifestó que el 80 por ciento de los mismos habían sido anunciados desde 2003 y no se ejecutaron por "falta de financiamiento externo". Sin embargo, en el 2005, el mismo presidente pagó al FMI, en forma adelantada, 9.810 millones de dólares, con un 35% de las reservas del Banco Central.
Algunos datos que forman parte del plan de obras lanzado esta semana: la terminación de la Hidroeléctrica Binacional Yacyretá, que ya había sido un "relanzamiento" en junio de 2003. El programa para la finalización de la central Atucha II, que se había realizado el 23 de agosto de 2006. La edificación de una central termoeléctrica, cuya licitación fue llamada para el  6 de diciembre de 2006 (y ya había sido acordado con la empresa Skoda, de la República Checa, en octubre de 2004). "El gran subterráneo del oeste", anunciado por tercera vez por el secretario de Transporte Ricardo Jaime, el 5 de enero de 2007.