Un "cumpleaños" particular
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- Categoría: Trabajadores
- Publicado: Miércoles 11 de Febrero de 2009
(Fabiana Arencibia- Red Eco) Ciudad de Buenos Aires- Bajo el lema "Los trabajadores no somos cómplices de la mentira", se realizó hoy el abrazo tradicional a la sede de la calle Julio Argentino Roca 609.
Del abrazo, que desde la intervención del gobierno nacional hacen regularmente los empleados del INDEC, también participaron los trabajadores del IPEC de Rosario e integrantes de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE-CTA) de esa ciudad.
A fines de 2006 el INDEC fue literalmente intervenido por funcionarios del Gobierno nacional. El objetivo principal fue implementar mecanismos necesarios para que el índice que mide la inflación (IPC) no se disparara.
Este índice se utiliza para definir los niveles de pobreza e indigencia, para ajustar los intereses de los bonos de la deuda pública como parte del armado del coeficiente CER y como referencia en los reclamos salariales de los trabajadores.
El achatamiento provocado en este índice hace que mientras para el INDEC la pobreza en el 2008 alcanzó a casi 18 por ciento de los ciudadanos - de los cuales un 5,1 por ciento son indigentes- mediciones privadas estiman que estos porcentuales superaron el 30 y 11 por ciento respectivamente. Hablamos entonces de 12 millones de pobres, de los cuales hay casi 5 millones de personas que no están reconocidos como tales en los índices oficiales.
En el caso de la inflación de 2008, el organismo estadístico la calculó en un 7,2 por ciento mientras que mediciones privadas la ubicaron en un 23,5 por ciento, más de tres veces por encima de las estadísticas oficiales.
Durante el abrazo del mes de enero, Cynthia Pok, ex funcionaria del organismo desplazada durante la intervención, aseguró: "Siguen las patotas en el INDEC. La diferencia es que antes venían de visitantes y ahora son empleados. Se ha contratado una enorme cantidad de personas, entre 40 y 50 con la función específica de ser patota".
Hoy a dos años nada cambió en el organismo. Así lo manifestó Marcela Almeida, encargada del operativo que medía la inflación. "Evidentemente la manipulación sigue, la intervención hizo metástasis en todo el Instituto, en todos los índices. Todos los programas están cuestionados. La Encuesta Permanente de Hogares (EPH) es uno de los más preocupantes porque ahora, con la crisis, si siguen con la política que han llevado a cabo de ocultar índices que no son auspiciosos, es probable que hagan lo mismo con la desocupación y el empleo", dijo Almeida.
Para la convocatoria a la jornada de hoy los trabajadores emitieron un comunicado que refiere a la historia del organismo. "Tenemos una larga historia de resistencia a los ataques de diversas administraciones contra el INDEC. Ciertamente los diferentes gobiernos han visto a las estadísticas públicas como la más contundente demostración de los errores en la aplicación de sus diversas políticas, pero siempre detuvieron su avance sobre el Instituto por la firme posición de sus empleados, aún en plena época en que se trató de imponer lo peor del pensamiento neoliberal por parte de los mismos personajes que hoy ocupan la dirección del instituto con los mismos laderos gremiales", subraya el pronunciamiento gremial.
"Hoy el sólido prestigio que el esfuerzo de sus trabajadores había forjado, ha dado paso a la triste burla de que son objeto los magros informes que intentan presentar a la sociedad, una realidad que sólo existe en la imaginación de los funcionarios que los diseñan y divulgan y en la de aquellos que, para seguir obteniendo las vergonzosas prebendas que reciben, los avalan y defienden", afirmaron.