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Chaco: La Pirámide, una reserva natural de papel sin protección

La continuidad de los desmontes en Chaco refleja situaciones absurdas, contradictorias y reveladoras del desinterés del Gobierno chaqueño para proteger el monte nativo y preservar la fauna,  los suelos y las aguas. Los repetidos desatinos se apoyan en el desinterés del propio Estado en la protección del último patrimonio común de los chaqueños, que diariamente se rifan.

 

(Por Centro Mandela) Chaco - Un caso paradigmático y representativo de la inexistencia o del abandono de las políticas de protección ambiental es la Reserva de Recursos naturales “La Pirámide”, ubicada en área protegida (Zona Amarilla – Categoría II), según el mapa de Ordenamiento Territorial del Bosque Nativo (OTBN). Esa reserva históricamente estuvo ocupada. Las familias que actualmente viven en el lugar explotan el monte para sacar madera y además cultivan sementera baja.

La Reserva está ubicada, campo de por medio, con la Estancia La Pirámide S.A. y por la picada con la Estancia La Fabiana. No está lejos de la Estancia Monterrey, que a su vez linda con la Estancia El Juramento. En toda esta microrregión se desmontó intensamente en 2018, aunque en la última se continúa desmontando. Es zona roja en materia de balance ambiental, que ya se ha perdido.

La Dirección de Fauna y Áreas Naturales Protegidas es el organismo responsable de custodiar la preservación del ambiente de La Pirámide. Está obligada a mantener intactos los bienes ambientales en toda la superficie de esa Reserva.

La gestión de ese organismo objetivamente puede calificarse como de nula capacidad conservacionista y de desprotección por lo que compromete negativamente el funcionamiento de la Subsecretaría de Recursos Naturales del Ministerio de la Producción, de la que operativamente depende.

El Vía Crucis de La Pirámide

La Reserva de Recursos La Pirámide fue anterior a la denominada “campaña de colonización de El Impenetrable”, junto a otra ubicada en Fuerte Esperanza, según el Plan General de Manejo del Parque Nacional Chaco, elaborado en 2001 en un taller de validación del que participaron organismos oficiales, nacionales y provinciales, organizaciones independientes y pobladores.

Pero La Pirámide sucumbió y fue desafectada como reserva en 1985. Parte de ella fue enajenada. Recién en 1997 resurgió la idea de recrear esta reserva de recursos con financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial de las Naciones Unidas (GEF).

Desde esa época las tierras de la futura reserva estuvieron ocupadas permanentemente en toda su extensión; sin embargo el Ministerio de la Producción nunca desarrolló ni intentó un proceso de reubicación o relocalización de las familias ocupantes del predio.

Según el Plan de Manejo del Parque Nacional Chaco, en 1997 surgió un proyecto de conservación integral del Chaco Seco. Mediante fondos del GEF se efectuaron prospecciones en el sector chaqueño fronterizo con la Provincia de Santiago del Estero. De estas investigaciones surgió una propuesta de Reserva y Parque Nacional que comprendían una extensión superior a las 120.000 hectáreas, que abarcaría la entonces “ex reserva” provincial La Pirámide. De acuerdo a este trabajo, para esa fecha “su concreción aún permanecía en gestión”, la que fue perezosa y fracasó.

Contaduría General los puso al descubierto

En 2008 la Contaduría General de la Provincia realizó un Inventario del Sistema Provincial de Áreas Naturales Protegidas. En su conclusiones, incluyó a la reserva “La Pirámide” y detalló que estaba afectada “en un primer momento a la Subsecretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente a través de una Resolución del Instituto de Colonización (0010/04) y posteriormente por el Decreto Nº 2158/07”, con el fin de incorporarla a un Sistema  Provincial de Áreas Naturales Protegidas (SPANP) con la categoría “Reserva de Recursos”.

Nuevamente, a finales de la primera década del Siglo XXI, en ese inventario se señaló que “en el área se presenta un conflicto por el dominio de la tierra, que el Estado Provincial intenta resolver y recuperar su superficie”. Los resultados fueron negativos porque nunca recuperaron los dos lotes sumados hacen una superficie total de 4.983 hectáreas.

La realidad de la reserva La Pirámide

Esta reserva se constituyó con dos parcelas. La número 23 tiene una superficie de 3.373 hectáreas y la Parcela 33 de 3.380, ambas ubicadas en la Circunscripción V del Departamento Almirante Brown.

Sin embargo, de estas superficies el Instituto de Colonización -por Resolución Nº 10 del 27/01/04, dictada en el Expediente Nº 007/04- redujo la Parcela 23 a 2.483 hectáreas, aproximadamente, y la Parcela 33 a una superficie de 2.500 hectáreas para la Reserva. El resto de la superficie de ambos lotes destinó para los ocupantes que habitaban en el lugar. Esta Resolución fue refrendada por Decreto 2158/07.

Conviene aclarar que, según el Gobierno de la época, La Pirámide estaba dentro de la Reserva de El Impenetrable Chaqueño, que iba a tener una superficie de 1 millón de hectáreas, según la Resolución Nº 137/04 que fue dictada en el Expediente Nº 65/04. De ese total predial 250 mil hectáreas estaban ubicadas en el Departamento Almirante Brown y 750 mil en el Departamento General Güemes, de acuerdo al Decreto 672/04.

Esa gran reserva fue creada por los instrumentos legales, pero nunca existió como tal. Es una de las tantas ficciones de distintos gobiernos para vestirse de “verde” sin gestionar políticas de conservación de los bienes naturales, especialmente el forestal.

Ocupantes de la Parcela 23 de la Reserva

La Parcela 23 está subdividida en una mitad Norte y una mitad Sur. En la fracción Norte se encuentra el puesto “La Bendición”, que está ocupado por Margarita Rosa Lorenz, oriunda de Coronel Du Graty, del sudoeste chaqueño sojero.

Según vecinos Lorenz “habría comprado el campo para luego pretender su regularización”. Es evidente que pudo haber sido víctima de una estafa poco ingenua en el que habría intervenido un hombre del Instituto de Colonización.

En los papeles, Lorenz alguna vez fue propietaria de las Parcelas 247, 248, 249, 252, 253 y 254 y las Parcelas 74 y 84, que sumadas totalizan 17 mil hectáreas, que en la actualidad constituyen una unidad de negocios y de producción que funciona bajo el nombre de fantasía “Estancia El Juramento”, hoy propiedad de Las Guindas S.A., del fuerte empresario aceitero Roberto Urquía, titular de Aceitera General Deheza (AGD), que en su momento fue senador nacional por Córdoba durante el kirchnerismo en el período 2003-2009, integrando el Bloque del Frente para la Victoria.

De cualquier manera, las ocupaciones prosiguen a buen ritmo. Se puede corroborar que en el ángulo noroeste (NO) existe extracción intensiva de madera y que los paleocauces (caños) están siendo laboreados, fundamentalmente para cultivar sandías. Además, se observan piquetes y que en uno de los puestos se construyó una confortable vivienda de dos plantas.

Por otro lado, la fracción Sur estaría ocupada por el grupo de Konovalchuk. Varios Konovalchuk son productores en el sudoeste chaqueño.

Pequeños ocupantes de La Pirámide

Por otro lado, la Parcela 33 pasó por distintas etapas y contingencias. En un momento se eliminó la Reserva para adjudicar el lote a un ocupante, aunque como siempre estos “ocupantes” no eran lugareños. En el Instituto de Colonización afirman que incluso se llegó a confeccionar algún instrumento. El intento se frustró.

En todo caso, la ocupación fue más modesta que la detectada en la Parcela 23. Incluso, en el ángulo noroeste de esta parcela se colocó un cartel –prácticamente ilegible por su antigüedad- puesta por la Dirección de Flora y Fauna en la que se publica que el campo es la Reserva La Pirámide.

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