"Maduro es víctima de un ataque furibundo de la OEA, el Mercosur y el Departamento de Estado"
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- Categoría: Entrevistas
- Publicado: Lunes 10 de Abril de 2017
Así lo afirma el escritor y periodista venezolano Modesto Emilio Guerrero en una entrevista realizada por Mario Hernandez que compartimos
M.H.: El miércoles 29 de marzo en Venezuela el Tribunal Superior de Justicia adoptó una resolución que provocó una serie de reacciones, el presidente del Parlamento venezolano aseguró inmediatamente que había un golpe de Estado, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, habló de autogolpe de Estado, convocó al Consejo permanente de la organización y a pesar que Bolivia lo preside y había cancelado la sesión, decidieron retomarla con la presidencia de Honduras y con la participación de doce de los treinta y cinco miembros de la OEA. ¿Podrías analizar estos hechos?
M.E.G.: Hace quince meses hubo elecciones legislativas en Venezuela y las ganó la derecha opositora. Entre los electos por las listas de la oposición entraron cuatro diputados que fueron impugnados por la Fiscalía de la República y por el Consejo Supremo Electoral. Tres de ellos porque la mayoría de los votos eran truchos, fraguados, comprados, votos de muertos, son los del Amazonas y otro que era diputado por el Zulia, que tenía un expediente criminal abierto. A los pocos días la presidencia del Congreso decide excluir al candidato del Zulia, pero no lo hizo nunca con los tres de Amazonas. Esos tres son los que le garantizan en la Cámara legislativa en manos de la derecha la mayoría calificada que les permite cambiar, modificar o derogar leyes orgánicas y constitucionales. Ese es el origen del conflicto actual.
Hace un año el Tribunal Supremo emitió una sentencia diciéndoles que llamen a elecciones y se relegitimen, un año después emite otra sentencia que es la que armó el lío ahora, la diferencia es que esta vez el Tribunal Supremo les dio 48 horas para regularizar su situación, sino entraban en desacato a la sentencia del tribunal, ahí es donde se arma la lucha de poderes, porque la directiva de la asamblea del Parlamento decide declararse en estado de rebelión, no acepta y rompe ante las cámaras de televisión del mundo la sentencia del Tribunal Supremo. Algo inusual en la vida política de cualquier país más o menos ordenado. Esa es la secuencia de hechos.
Sin embargo, la imagen sembrada no es que el Parlamento rompió una sentencia del tribunal, sino que el tribunal violó el derecho democrático a tener Parlamento y eso es obra de Maduro. Luego hay un autogolpe o fujimorazo. Es una cosa absurda que se convierte en verdad porque los medios titularon lo que Almagro dijo, que fue un autogolpe.
Chávez se apoyaba en el movimiento chavista cuando lo atacaban
M.H.: El domingo 2 de abril publicaste en Página 12 un artículo “¿Maduro es indefendible?”. Me gustaría que compartieras tus reflexiones con nuestros oyentes.
M.E.G.: Puse en carácter de pregunta ese asunto porque la respuesta solo la puede dar la realidad y no yo. La realidad es que Maduro es víctima de un ataque furibundo de la OEA, del Mercosur y organismos del Departamento de Estado. Esos organismos son muy duros, entonces Maduro que ha cometido errores muy importantes, gravísimos, tiene el derecho a la prueba porque hay un error que no ha cometido, que es el de someterse a las órdenes de los EE. UU., como hizo Macri, el gobierno de Temer, Kuczynsky y Juan Manuel Santos, entre otros. Entonces, Maduro logra resistir un embate muy fuerte pero cometiendo errores muy graves que lo pueden empujar a situaciones sin retorno, a un estado de situación interna que no pueda manejar y produzca un fenómeno sin retorno, esto significa, que ordene reprimir, que haga una razia con la militancia que lo adversa dentro del chavismo o que pacte con el imperialismo como hicieron algunos en el pasado. Cualquiera de esas opciones me obligaría a sacar los signos de interrogación del título y pondría en forma afirmativa que Maduro es indefendible, porque si reprime lo es.
Cuando Kadafi ordenó reprimir al pueblo que salió pacíficamente a marchar y protestar contra él, yo publiqué un artículo que se llamó “Kadafi el indefendible”. Habrá que ver qué pasa con Maduro, no sé si va a hacer esto, pero sí sé que las condiciones internas, la presión al chavismo y el debilitamiento progresivo de su gobierno pueden conducirlo a una de esas tres salidas que serían por derecha, también tiene la posibilidad de optar por una salida por izquierda, que es lo que planteo en ese artículo, él tiene en sus manos el Parlamento Comunal, esa sería su salida por abajo, pero él eligió ir por arriba; aun teniendo razón contra el Parlamento de derecha, usa al aparato judicial para pelear contra el Parlamento, en vez de utilizar al Parlamento popular. Escogió una opción en la que no podía ganar nunca, porque allí sus enemigos tienen más amigos en el exterior y en el interior que él.
El jueves 30 de marzo, hubo una marcha de jubilados, que le iban a llevar una carta a Maduro al Palacio de Miraflores, la Guardia nacional se los impidió, y los pobres viejitos tuvieron que tragarse la carta. Eso no es represión, pero es una señal de un gobierno con el que un sector del pueblo chavista rompió; se alejó y él, debilitado y arrinconado por la derecha y por la izquierda, tiende a apoyarse en lo único que le queda que son las Fuerzas Armadas y las policiales. Cómo se le ocurre mandarle la Guardia nacional a los jubilados, eso no lo habría hecho Chávez, pero no por bueno, sino porque se apoyaba en el movimiento chavista para defenderse cuando lo atacaban. Maduro no acude al pueblo chavista para defenderse, ni en la calle ni en el voto, no hace elecciones.
Cuando Chávez estaba asediado, lo primero que hacía era convocar a elecciones y les ganaba. Maduro no convoca a una forma democrática de resolución de la crisis, sino que enfrenta a la derecha a través del aparato judicial y por abajo enfrenta también al pueblo chavista, eso lo va debilitando y obliga a prever una salida que no es la que uno quisiera, habiendo luchado junto con él y con Chávez.
M.H.: Julio Borges, el titular de la Asamblea parlamentaria del partido Primero Justicia, que es el mismo de Capriles, hizo un llamado para que el sábado 1º de abril se hicieran acciones de calle e inclusive mencionaba una gran movilización en el transcurso de la semana.
M.E.G.: Y Capriles le pidió a los generales del ejército que se pronuncien, ambas cosas convergentes es un llamado a rebelión.
M.H.: Justamente, te quería preguntar qué repercusión tuvieron estos llamados.
M.E.G.: Tuvieron muy poca repercusión, pensé que iban a llevar más gente porque la derecha tiene mucha, pero es un estado de adhesión distante, más sentimental que práctico o militante como la tenían antes. La derecha convocó alrededor de diez mil personas, el chavismo también lo hizo y fueron alrededor de veinte mil, eso no es el chavismo y eso tampoco es la derecha.
M.H.: ¿Hay agotamiento de ambos?
M.E.G.: De ambos lados, es lo que produjo un fenómeno poblacional del voto que es la llamada tercera posición “ni ni”, ni chavista ni de oposición, son sectores del chavismo y sectores del anti chavismo que se corrieron al centro y ya no les importa nada, quieren solo consumir, comer, vivir. Es un estado de situación delicado porque cualquier loco puede aparecer por derecha y apoyarse en ese sector que lo aceptaría.
El triunfo de Lenin Moreno es una patada en la cara a Macri y a todas las fuerzas de derecha que esperaban su derrota como prólogo para echar a Maduro
M.H.: ¿Qué análisis te mereció el triunfo de Lenin Moreno en Ecuador?
M.E.G.: Que ganó perdiendo. Porque ganó por un poquito más de 3 puntos, pero perdiendo masa de votos. La cantidad de votos que obtuvo Correa en la última elección no la obtuvo Lenin. Lo curioso es que la prensa destaca que la diferencia es poca, como si con Macri no hubiera habido una menor; esos son los enemigos, que siempre van a hacer eso.
Lo importante es que significa una patada en la cara a Macri y a todas las fuerzas de derecha que esperaban ansiosas la derrota de Correa como prólogo inmediato para echar a Maduro. Eso no ocurrió, entonces el progresismo ecuatoriano logró preservarse y en cierta medida es un aire fresco a favor de Maduro, que tiene más chances ahora que si Lenin Moreno hubiera sido derrotado. Habrá que ver cómo resuelve el nuevo gobierno la situación porque el precio del petróleo no va a subir.
M.H.: Eso afecta tanto a Ecuador como a Venezuela.
M.E.G.: Exacto. Entonces Lenin Moreno tiene que arreglárselas con lo que hay, esto hoy es más difícil porque tiene que hacerlo solo, antes tenía al ALBA y a Chávez haciendo proyectos de unidad con todos los países amigos, eso se acabó, ahora tiene enemigos en todos lados. Es una situación difícil, hay que ser muy cuidadoso porque es un gobierno que no acepta el disciplinamiento de Washington y ese es un mérito, especialmente en este contexto, ese mérito tiene que ser rescatado y valorado.
M.H.: Mencionaste a Kuczynski que retiró su embajador de Venezuela.
M.E.G.: Sí. Fue el más agresivo, además hizo declaraciones muy duras. Es como Macri, es un banquero, no se debe a nada, tiene muy poco manejo diplomático. Si pudiera atacar a Venezuela en forma física lo haría, en realidad se parece más a Uribe que a Macri.
M.H.: Quería consultarte sobre la situación en Paraguay.
M.E.G.: Paraguay es uno de esos casos llamativos, es la muestra de que al cuero seco si lo pisas de un lado brota en otro lado, la institucionalidad y la crisis social latinoamericana no ha sido resuelta por los gobiernos que han ganado por elecciones o por trampa a la izquierda progresista. La izquierda progresista no hizo mucho en algunos países, pero en todo caso, la derecha que llegó hace peor o no hace nada para estabilizar y esa inestabilidad es lo que muestra el caso paraguayo, donde un tercio del edificio del Parlamento fue quemado por la gente en una pelea que todavía no está clara, entre internas y rebelión.
No es una rebelión popular, es una mezcla de rebelión de hartazgo con interna del Partido Colorado. Se tirotearon, pero lo lamentable es que no hay una base social, un movimiento, una rebelión social que le dé otra perspectiva, otra dinámica y otro tinte. Eso no se ve todavía.
M.H.: Te quiero comprometer para que en una futura entrevista desarrollemos el tema del Parlamento Comunal y las Comunas en Venezuela. Es algo poco conocido y lo señalaste como una posible salida a la izquierda, aunque la veas como la menos probable.
M.E.G.: Es la menos probable hoy porque el gobierno no la potenció ni lo quiere hacer, pero sería la más probable si el gobierno convocara al pueblo, a medio millón de personas detrás del Parlamento Comunal para enfrentar al otro Parlamento, ahí no solo el pueblo, sino también la vanguardia chavista que se alejó por desánimo volvería porque encontraría una salida parecida a la de Chávez.