Trabajadores de la Salud

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Ayer jueves, los Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (que atiende a la población infantil) en la Ciudad de Buenos Aires, se movilizaron para exigir un aumento salarial del 40 %, defender los derechos de los trabajadores y que se garantice el derecho a la salud de la población infantil. Denunciaron intimidación a 3 trabajadores y persecución sindical. Además, la paulatina destrucción del equipo de salud y del trabajo interdisciplinario y un clima laboral adverso para el adecuado trabajo asistencial que podría vulnerar el derecho a la salud de la población infantil, no sólo de esta ciudad sino también de todo el país.
También hoy los trabajadores del Hospital de Wilde (zona sur del conurbano bonaerense) cortaron las vías del ferrocarril Roca en reclamo de mejores salarios y mayores recursos para el hospital. Los vecinos acompañaron el reclamo como parte de  una “comisión en defensa del hospital”.
Según los trabajadores del nosocomio, pese al anuncio oficial del 28 por ciento de aumento, “ofrecen un 10 por ciento a partir de abril, más 250 pesos, lo que sigue manteniendo nuestros salarios al límite de la indigencia”.
Los bajos salarios, provocan que el hospital se encuentre  vaciado de recursos humanos, que es la mayor falencia, pero hay además malas condiciones laborales y edilicias.
Por su parte, el martes, los médicos y profesionales del Hospital Posadas (zona oeste del conurbano bonaerense) realizaron un nuevo paro de 24 horas. La Asociación de Profesionales denunció una  grave crisis: la atención ambulatoria es casi nula, escasean las cirugías y los partos, hay cada vez menos sangre para transfusiones, se cierran aéreas de internación cotidianamente, no se aceptan derivaciones, se trabaja sin historias clínicas. De 500 camas disponibles, solo hay 317 ocupadas y alrededor de 70 mil pacientes dejaron de atenderse en las últimas diez semanas.
En agosto de 2009, en el Ministerio de Trabajo de la Nación, se reunieron los funcionarios del Ministerio de Salud, las autoridades del Hospital y a los trabajadores . Allí firmaron un compromiso de pasar a planta permanente a 650 profesionales  a fines de 2010. Aun no se efectivizo ningún traspaso.
Los profesionales y trabajadores denuncian sobrecarga de trabajo y violencia creciente que determina el éxodo incesante de médicos hacia la actividad privada.