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- Categoría: Trabajadores
- Publicado: Jueves 30 de Abril de 2009
Los trabajadores de El Cronista llegaron a un acuerdo parcial con la empresa. De esta forma termina –por ahora- el plan de lucha que duró 21 días. Las negociaciones re comenzarán en julio.
(Celeste Neyra- Red Eco) Ciudad de Buenos Aires- Los trabajadores de El Cronista firmaron un acuerdo con la empresa, luego de 21 días en los que, mediante diferentes acciones, mostraron su reclamo por un aumento salarial. En este tiempo pasaron: un paro de 24 horas “histórico”– según la propia definición de los trabajadores-; muchas reuniones en el Ministerio de Trabajo; asambleas permanentes; adhesiones de variadas y múltiples organizaciones.
Pero también pasó algo importante: comenzó la campaña electoral en la que el dueño del diario, Francisco De Narváez, participa activamente. Tanto, que días atrás reconoció que su campaña cuesta mucha plata pero es toda suya. Quizás los 120 asesores que trabajan para llevarlo a la banca en el Congreso nacional hayan participado de la decisión de realizar una nueva propuesta económica a los trabajadores… o quizás no.
Luego de que los trabajadores rechazaran la última contrapropuesta de la empresa, este miércoles se firmó el acuerdo por un aumento de 250 pesos no remunerativos para abril, mayo y junio y una garantía de cobro subsiguiente mientras dure la negociación salarial de 2009, que comenzará en julio.
Cabe recordar que luego de realizar una medida de retención de actividades, los trabajadores recibieron un telegrama amedrentador donde se los acusaba de perjudicar al diario y se los amenazaba con despedirlos.
El reclamo de los trabajadores había comenzado durante el 2008 y se debía retomar en febrero de este año, según un acta firmada ante el Ministerio de Trabajo. Sin embargo desde febrero hasta ayer, miércoles, las negociaciones no llegaban a buen puerto, pues la empresa ofreció siempre menos de lo que los trabajadores exigían. El reclamo original había sido de 300 pesos para enero, febrero y marzo, y de 500 pesos desde abril.
La situación era difícil para todos, pero periodistas, administrativos, fotógrafos, técnicos y otros trabajadores continuaban trabajando sin firmar, estando presentes sin trabajar, evitando realizar producciones periodísticas o infografías y otras medidas que hacían de la publicaciones, materiales poco atractivos.
En este contexto la empresa ofreció los 250 pesos. Y, en julio, se abre el diálogo. En un escenario seguramente más complejo, pero con la experiencia de los trabajadores de haberse organizado, haber realizado un plan de lucha y haber dicho “no”, en varias oportunidades.