De víctima a culpable

La militante transexual Julieta Torres fue baleada por un ex policía de Rosario, el 25 de marzo pasado. Días después la procesaron por robo calificado y la detuvieron en la cárcel de Coronda. La decisión de la justicia es rechazada por diversas organizaciones al considerar que intenta hacer pasar a Julieta “de víctima a victimaria” para victimizar a la policía santafesina que ocupa el segundo puesto en gatillo fácil en el país.
Julieta Torres recibió dos disparos en su cabeza por parte de un ex policía el viernes 25 de marzo. Quedó en estado de coma inducido, en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez. Diez días después de su alta, fue trasladada a la cárcel de Coronda, procesada por robo calificado para hacerla pasar de víctima a victimaria. Por ahora, el juez Luis María Caterina revocó la prisión preventiva por su estado de salud.
La organización feminista Pan y Rosas denuncia la política del Partido Socialista que “banca a la policía mafiosa que mató a Sandra Cabrera; que es cómplice del asesinato de Silvia Suppo; es la misma policía del asesino Feced (Agustín Feced procesado e imputado por 270 delitos de lesa humanidad cometidos en Rosario y Santa Fe, durante la última dictadora) y la segunda en el país en el ranking del "gatillo fácil”, y agrega: “Es este mismo gobierno el que subsidia a la educación religiosa, a la vez que cuenta con uno de los índices más altos de feminicidios en el país”.
Esta situación se da en un contexto violento para las mujeres transexuales. El 95% vive en situación de prostitución, el 64% no terminó sus estudios primarios, y el 84% no llegó a la secundaria y el promedio de vida es de menos de 40 años.
diego_astarita_grupo_fotografico_en_la_vuelta.jpgAdemás, en Argentina sólo en febrero y marzo hubo 24 femicidios. Y las mujeres tienen una causa adicional de muerte: Según el Ministerio de Salud de la Nación, cada mujer aborta ilegalmente en promedio dos veces a lo largo de su vida, y los abortos realizados en condiciones de clandestinidad e insalubridad son la principal causa de muerte entre mujeres pobres de 15 a 25 años.
En este marco, el comunicado de Pan y Rosas expresa: “Basta de persecución policial, basta de códigos contravencionales en el país, basta de discriminación, violencia y crímenes homo-lesbo-transfóbicos. Exigimos el derecho de gozar de nuestra sexualidad y nuestros derechos libremente sin la injerencia del Estado, los gobiernos oficiales, la oposición y la Iglesia”.


Foto: Diego Astarita - Grupo Fotográfico "En la vuelta"
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